Como una forma de ayudar a que las familias de sectores de bajos ingresos y con un alto grado de vulnerabilidad, aumenten sus ingresos a partir del incremento de la producción propia y, al mismo tiempo reduzcan los gastos asociados a la compra de alimentos, la municipalidad de Chonchi comenzó la implementación del programa de “Apoyo a la Producción Familiar para el Autoconsumo”, del Sistema Chile Solidario, gracias a una inversión del orden de los 22 millones de pesos.
En total 50 familias de bajos ingresos, de las cuales el 80% viven en los sectores rurales, están siendo intervenidas por profesionales del municipio local, quiénes están trabajando para fortalecer la capacidad de las familias para generar sus propios alimentos, a través de la implementación de técnicas sencillas relacionadas con el cultivo de hortalizas, crianza de animales y/o recolección de frutos o especies marinas, todo esto acompañado de talleres que buscan reforzar y complementar los conocimientos y experiencias de las familias.
El programa dio el vamos a través de un operativo por los sectores rurales de la comuna, encabezado por el edil Pedro Andrade Oyarzún, quién entrego personalmente las tecnologías a las familias beneficiarias. “Para mí es muy importante conocer en terreno las necesidades de los vecinos y a su vez poder entregarles una significativa ayuda que les mejorará su alimentación y además les permitirá tener algún acceso monetario extra que les mejorará sus ingresos familiares”, dijo Andrade Oyarzún.
“Mi historia familiar es de esfuerzo y superación, y la entrega de estos insumos es muy importante para las personas que somos de bajos ingresos, y a través del invernadero obtendré hortalizas frescas para mis hijos”, añadió la jefa de hogar, Elena Espejo de Quilipulli.
“Para nosotros es muy importante que la autoridad nos venga a visitar y conozca nuestras realidades, y sepa como gracias a la ayuda que nos están entregando salimos adelante junto a nuestras familias”, señalo el vecino Manuel Mera.
Finalmente la autoridad comunal destacó que las principales tecnologías implementadas por las familias corresponden a invernaderos, cultivos al aire libre y crianza de animales, mientras que en tecnologías complementarias destaca el manejo del suelo a través de la elaboración de abono orgánico.