La Brigada de Investigación Criminal de la PDI de Castro en conjunto con oficiales de la avanzada Quellón y funcionarios de la Ilustre Municipalidad de Quellón lograron terminar con el calvario de una mujer de la tercera edad (87) que sufría maltrato por parte de su hijo, el cual la mantenía viviendo en condiciones deplorables.
Tras recepcionar un antecedente por maltrato a un adulto mayor, los oficiales de la PDI formaron un grupo de trabajo con funcionarios del área social de la Municipalidad de Quellón y tras coordinar las diligencias a realizar con el fiscal Rodrigo Valladares, se dirigieron al domicilio donde se encontraba la víctima.
Los detectives arribaron al lugar, el cual funciona como cantina, y tras ingresar por una puerta oculta a un domicilio de dos pisos, encontraron a la mujer encerrada con llave en una pieza.
La mujer de 87 años y de iniciales M.A.O. se encontraba postrada en una cama, con sus frazadas y cobertores completamente mojados, al igual que sus vestimentas. Pero la sorpresa fue mayor para los detectives, pues los funcionarios descubrieron fecas de ratón en todo el dormitorio, incluyendo el interior de la cama.
Además de las nulas condiciones higiénicas, en el lugar existían ventanas tapadas con plástico y un balde con orina y excremento.
Tras el triste escenario, los funcionarios de la PDI solicitaron una ambulancia para que trasladara a la anciana al Hospital de Quellón, logrando dar auxilio a la víctima.
Finalmente los funcionarios municipales coordinaron el ingreso de la mujer a un asilo de ancianos con la finalidad de atender las necesidades básicas de la octogenaria. El hijo de la mujer quedó citado por parte de la Fiscalía Local de Quellón.