- Con el sistema frontal que desde este jueves afecta a numerosas regiones de Chile, el invierno ya llegó con todo. La doctora Sylvia Arrau, docente de Medicina Veterinaria de la Universidad del Pacífico, entrega importantes consejos para cuidar a nuestras mascotas.
El invierno tardó, pero apareció ya con todo su esplendor, afectando no solo a las personas, sino también a las mascotas, nuestros fieles compañeros que también sufren con las intensas lluvias que están afectando a gran parte de nuestro país.
Los humanos podemos protegernos con paraguas, pero ¿cuál es la alternativa para las mascotas? “Si la lluvia es relativamente fina, dos de las tres capas de pelaje se ven afectadas. La recomendación es ponerle ropa a la mascota, ya sea una capa o un chaleco en días de lluvia. Esto sirve sobre todo en los animales de pelos cortos”, asegura la docente de Medicina Veterinaria de la Universidad del Pacífico, Sylvia Arrau.
Eso sí, la idea tampoco es cubrirlo con frazadas y gorros como a un niño pequeño. “A los animales no les gusta que los tapen. Lo esencial es que su cama, su lugar, esté seco”, precisa.
Por lo mismo, una tarde lluviosa no es el mejor escenario para sacar a pasear al perro. Pero si el animal está acostumbrado a esa rutina de paseos, hay que hacerlo. “Hay mascotas que siempre han estado en el patio y como son de pelo largo no sufren tanto con las bajas temperaturas. En lo posible hay que proteger a las mascotas de la lluvia, pero lo más importante es que el animal tenga un lugar seco donde mantener su calor corporal, alguna casita donde cobijarse”, argumenta la especialista.
¿Qué hacer para protegerlos? La médico veterinaria entrega algunos tips. “Depende de muchos factores. Primero hay que diferenciar si la mascota ha sido criada en casa o si pasa la mayor parte del tiempo afuera en el patio. Tampoco se debe olvidar si tiene pelo largo (como un pastor alemán) o corto (como un beagle)”, apunta.
“Si la mascota vive adentro de la casa y sale poco, solo para hacer sus necesidades, hay que evitar los cambios bruscos de temperatura, ya que la mayoría de los perros o gatos caseros están acostumbrados a la calefacción y se ponen de frente a ella. Por eso, antes de sacarlos afuera, hay que ponerlos en una zona de transición, por ejemplo una habitación sin calefacción unos cinco minutos. Así, el paso a la baja temperatura no va a ser tan fuerte y se disminuyen las posibilidades de enfermedad respiratoria en la mascota”, explica Arrau.
Es muy común escuchar que el pelaje protege a los animales del frío y que es por esa razón que no hay que preocuparse por ellos en invierno. ¿Mito o realidad? “La temperatura promedio de un ser humano es de 36,3 C°, mientras que la de un animal es de 38 C°. Esos grados corporales más le permiten a los gatos y perros soportar mejor el frío, pero también es algo relativo. Hay algunos que tienen tres capas de pelo, mientras que otros son muy sensibles a las temperaturas. Los que más sufren son los cachorros y los más viejos, porque tiene problemas para regular la temperatura”, señala la profesional.
Por último, aunque los seres humanos añoramos una sopa en días invernales, los animales no deben cambiar su alimentación a causa del clima. “Su comida debe ser la correcta según su peso y actividad. Eso sí, hay que tener cuidado con el agua, ya que si está muy fría puede generar problemas”, puntualiza la docente de Medicina Veterinaria de la Universidad del Pacífico.
Consejos para cuidar a tu mascota en invierno:
Ø Revisa su “casa”. Siempre tiene que ser un ambiente seco donde pueda mantener la temperatura corporal.
Ø Evita los cambios bruscos de temperatura. No lo saques afuera de la casa sin antes dejarlo un rato en una “zona de transición”.
Ø Preocúpate de que el agua esté a una buena temperatura. Si está muy fría puede producir malestares.
Ø Ponle ropa, como capas o chalecos, para ayudarlo a soportar el frío.
Ø Revisa las orejas de tu mascota. No deben estar húmedas, ya que se puede producir una enfermedad en esa zona.