Un llamado a no caer en la irregularidad que implica la compra de una “propiedad” en campamentos de la capital regional, realizó el director regional del SERVIU, Fernando Gunckel, tras la publicación de diversas ofertas de este tipo en redes sociales. En dichas publicaciones, personas ofrecen la venta de mediaguas o terrenos ubicadas en campamentos, específicamente en las laderas Angelmó, Lintz y MacIver, estableciendo incluso precios cercanos a los 3 millones y medio de pesos por una construcción precaria con conexión irregular al tendido eléctrico y sin servicios básicos.
La autoridad señaló que este tipo de transacciones, si bien corresponden a tratos entre privados, comprometen un traspaso ficticio de derechos sobre una propiedad que no es tal, en circunstancias que los terrenos donde se emplazan los campamentos pertenecen a particulares o a entidades públicas. “Además, lo más riesgoso, es que están ubicados en zonas de peligro de derrumbes o deslizamientos de terreno, configurando asentamientos cuyos accesos son muy difíciles y representan un enorme riesgo en caso de emergencias, como incendios, donde ya hemos tenido experiencias muy dolorosas en el pasado, con personas fallecidas y lesionadas”, señaló el director.
De acuerdo a Gunckel, este tipo de acciones dificulta enormemente el trabajo del Minvu para erradicar a las familias de estos campamentos que se ubican en terrenos de riesgo. “El Minvu trabaja hace muchos años con las familias de campamentos de las distintas laderas, con el objetivo de que abandonen estos lugares por su seguridad. En este trabajo de largo plazo, además de otorgar subsidios habitacionales, se ha trabajado en el desarrollo de proyectos para estas familias, en la vinculación a comités de vivienda, en el acompañamiento de las familias más vulnerables para acceder a una casa definitiva. Incluso hemos otorgado subsidios de arriendo y de gastos de traslado transitorio, para que abandonen más rápido las laderas, con el compromiso ante notario de desarmar sus viviendas. No obstante, nos encontramos cada cierto tiempo con este tipo de ofertas que obstaculizan la labor nuestra y de otros organismos con quienes compartimos la tarea de entregar mejor calidad de vida a las familias que realmente lo necesitan”, afirmó.
En ese contexto, se detalla que desde 2015 a la fecha, 56 familias de las laderas Angelmó, Lintz y MacIver han sido beneficiadas con subsidios individuales para compra de vivienda y han abandonado los campamentos, a lo que se suman actualmente 5 familias que se erradicarán al proyecto Vista Cordillera, hoy en etapa de ejecución, y otras 6 que cuentan con subsidio de arriendo vigente.
La desocupación de las laderas es clave, además, en el trabajo de reconversión de los terrenos ocupados por campamentos. “En las ciudades donde trabajamos en la erradicación de campamentos, en paralelo se elaboran proyectos para la redestinación de los terrenos, especialmente si son zonas de riesgo, con la colaboración de los municipios, de otras organizaciones y de sus propietarios. Con ello buscamos lograr que estos predios se destinen a espacios públicos destinados a la recreación, deporte, cuidado de la naturaleza u otros fines que beneficien a la comunidad”, declaró el director regional.