Este tejido es una barrera natural del diente, que sin el cuidado adecuado puede dañarse, favoreciendo la aparición de caries o, incluso, alterando funciones como la masticación, fonación y deglución.
El esmalte dental es la capa que se observa, a simple vista, en una sonrisa. Este tejido es considerado el más duro del organismo y actúa como manto protector de la corona dentaria. Se compone principalmente de sales de calcio (hidroxiapatita), además de pequeñas cantidades de otros elementos, tales como flúor, carbonatos, sodio y potasio.
“Los ácidos producidos por las bacterias que habitan en la boca pueden debilitar el esmalte de los dientes, disolviendo su composición y dando paso a la aparición de caries dentales”, explica el odontólogo de Clínica Vespucio, Ivor Beros.
¿Por qué proteger el esmalte dental?
Cuidar el esmalte es importante porque se trata de una barrera natural del diente. Sin este tejido, o si este se daña, se pueden ver afectadas algunas funciones bucales como la masticación, fonación y deglución. “Además, la pérdida del esmalte puede incluso llevar a problemas psicológicos asociados a alteraciones estéticas de la sonrisa, que solo pueden ser reparadas con maniobras y tratamientos más complejos”, afirma el especialista.
Cómo fortalecer los dientes
Una dieta basada en azúcares, una mala higiene dental y la presencia de microorganismos son factores que se conjugan y desembocan en la aparición de caries. Para evitarlas, el Dr. Beros sugiere cuidar los siguientes aspectos:
1. Alimentación. Este factor afecta directamente la formación y el avance de las caries. Por ello, se recomienda mantener una dieta saludable, rica en calcio, y evitar el consumo de alimentos con azúcares fermentables.
2. Cepillado dental. Una higiene excesiva, realizada con un cepillo demasiado duro y/o con agentes abrasivos de uso permanente, desgastan el esmalte dental. Lo mismo ocurre al efectuar el cepillado con una presión exagerada.
3. Tratar el reflujo gastroesofágico o bulimia. Los ácidos estomacales tienen un pH muy nocivo para el esmalte y pueden disolverlo. Por eso, es fundamental consultar con un especialista ante la presencia de estas patologías, que exponen a la dentadura a estos ácidos.
4. Bruxismo con contacto dentario. Genera alteraciones dentales que pueden llegar más allá del desgaste del esmalte, exponiendo zonas sensibles del diente, entre otros daños a nivel muscular y articular. Se debe consultar inmediatamente frente a esta condición, ya que puede llegar a convertirse en un problema funcional y estético importante.
Cuándo consultar
El control periódico con un odontólogo es fundamental para mantener una adecuada salud bucal, ya que las caries, además de ser una de las enfermedades con mayor prevalencia en el mundo y en Chile, pueden ser prevenidas y tratadas de mejor forma cuando se pesquisan tempranamente. “El control debe ser clínico y radiográfico, con el fin de dar un diagnóstico correcto y decidir si el enfoque de la atención será preventivo, recuperativo o rehabilitador”, concluye el especialista.
Beneficios del flúor
El experto recomienda usar pastas dentales con flúor. “Este elemento, en concentraciones más altas pero controladas, además de fortalecer el esmalte, puede remineralizar las zonas atacadas por los ácidos producidos por bacterias cariogénicas, ayudando a tratar de forma no invasiva las caries”, afirma.
Por lo general, las que están indicadas para adultos vienen con la dosis recomendada de flúor, pero existen algunas con mayor concentración que deben ser indicadas por un profesional en casos específicos. Beros indica: “Una dosis demasiado alta de flúor podría dañar el esmalte en formación, por lo que su administración debe ser supervisada en todo momento por un odontólogo”.